VIGDIS ROSENKILDE
Todo comenzó así: "En 2010, decidí crear el trabajo de mis sueños. Debía incluir buenas materias primas, aventuras en la selva amazónica, producción ética, comunicación, y quería aprender algo nuevo"... de ahí al un gran chocolate ha pasado tiempo y mucho trabajo.
Como pastelera mezclaba chocolate prefabricado con otras materias primas, pero tenía un el deseo de crear mi propio chocolate y aprender sobre todo lo que influye en el sabor de los granos de cacao.
En 2015 Vigdis comenzó a viajar para aprender sobre cacao allí donde se cultivaba. Ha pasado más de tres años en Latinoamérica y ha visitado más de 50 plantaciones de cacao.
En Perú encontró el cacao y los socios necesarios para su proyecto, con plantaciones agroforestales de calidad. Desde entonces, pasa tres meses al año en Perú, participando en cada etapa que influye en el sabor del chocolate, desde la plantación de cacao hasta la fábrica.
Compra el cacao directamente a los agricultores buscando ofrecer un precio justo y obtener materias primas excelentes
El obrador también está en Perú de modo que allí queda el beneficio.
En los últimos años, ha obtenido reconocimiento y premios por su chocolate, tanto por calidad como por comercio directo.
Además Vigdis es catadora certificada de cacao y chocolate además de hacer difusión de su concepto.
